EL AMIGO DE ALBERTO

 

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El comisario intentaba distraerse de este caso, pero como siempre acabó mirando los documentos, releyéndolos, buscando una nueva pista en la que quizás no se había fijado antes. Después de varias horas de reflexión, se dio cuenta de que no había interrogado a Javier, que su hombre estaba en la lista de los sospechosos,però nadie había escuchado su versión de los hechos, y él podría aportar información útil.El commissario había leído por primera vez el nombre de Javier en el diario de Alberto pero no había conectado.

El comisario decidió hacer algunas preguntas a la profesora antes de interrogar a Javier, para hacerse una idea.

Ella le dijo que Javier era un chico normal, que estudiaba , y leía mucho y que ahora

trabaja como camarero en el restaurante de sus padres, y allí fue el comisario.

El comisario llegó al restaurante , llamado “ el misterioso”.Este restaurante era muy conocido.Un restaurante muy grande, con muchas mesas.

El propietario era muy amable ,era su sueño abrir un restaurante y desde que conoció a Patricia ( la madre de Javier) este sueño se había hecho realidad, él era conocido por todos por su restaurante y por los platos.

El comisario entró en el restaurante que conocía bien (allí comía su plato favorito cada domingo),fue recibido por Mario (el propietario) que lo saludó y le preguntó cómo estaba y lo dejó en las manos del camarero.

C:Perdone, ¿podría tener una mesa?

J: Claro que sí, lo acompaño a su mesa.

Cuando el comisario acabó de comer su cocido madrileño, y el restaurante estaba casi vacío, decidió hablar con Javier. El comisario se presentó, y Javier se quedó sorprendido. Se podía leer la tristeza en sus ojos, pero Javier respiró hondo,se armó de valor, y comenzó a contar su historia: nació en un pueblo pequeño con su familia,él odiaba ese pueblo, luego se mudó a Tierra Escondida, y mientras todos en la escuela lo ignoraban, Alberto decidió hacerse su amigo. Eran muy parecidos, a los dos les gustaba leer, iban bien en la escuela y sacaban buenas notas. La única diferencia entre ellos era que Alberto tenía una gran familia, mientras que Javier sólo tenía a su madre. Alberto y Javier pasaban mucho tiempo juntos jugando y leyendo, pero sobre todo, como buenos amigos, se contaban todo.

El comisario decidió no hacer preguntas, sólo tomar notas, así que Javier siguió contando la historia y recalcó varias veces que Alberto, en el último periodo de su desaparición, estaba muy extraño, no hablaba mucho con Javier y nunca tenía tiempo. Javier había reprimido su dolor durante demasiado tiempo, así después de hablar de su arrepentimiento por no haber ayudado a Alberto y no poder ayudar a su familia, empezó a llorar y no pudo parar.

¿Nos está ocultando algo? ¿O después de 20 años su dolor y sus sentimientos siguen tan vivos?

Erika Z., IIIB